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Concentración frente al Congreso
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My BDD story (ENG)
Hace 10 años
viernes, 29 de abril de 2011
martes, 8 de febrero de 2011
Amagues del Amago: "La travesía"
Capítulo 1 Tomo 2 Versículo 4:3:7 Ubicación nueeeevee (?)
Paso a relatar.
Con Nuco, desde el verano pasado (no me acuerdo cómo salió el tema) se nos ocurrió hacer una especie de excursión, pero tomándolo como una meta, tal como escribir un libro, plantar un árbol, bla. Estábamos a full con la idea de caminar a todos lados, así fuimos a varios ríos que quedaban medio en la loma del orto, a veces acompañados a veces no, pero con ganas de bajar la buzarda de alcohol, chocotorta y milkshakes. La caminata más anecdótica seguramente debe haber sido yendo al baden de los corrales (un río que me encaaaanta mal, del pueblito a donde voy de vacaciones(foto1))
lo anecdótico de esto fue que no me acordaba cómo ir, y nuco en un principio no sabía de qué río se trataba, así que tomamos un camino y nos cruzamos con un gaucho a caballo que nos dijo "niiiiño pero eso queda como a 22 kilóóómetros" (con tonito puntano). Probablemente no haya dicho eso textualmente pero fue algo parcido y más tarde era lo que nosotros andábamos diciendo con motivo de burla al tipo (porque sabíendo que ese lugar quedaba como a 10 km, pensamos que nos había dicho cualquier banana). Finalmente, nos dimos cuenta que el chabón no estaba demasiado equivocado porque prácticamente habremos caminado unos 18 kilómetros más, por haber elegido otro camino menos directo y otos 5 kilómetros de vuelta. Cuando llegamos al río... estaba seco. Y no sólo que estaba completamente seco, sino que se había desatado una tremenda tormentita de viento y arena que nos hacía mierda los ojos y las piernas. Ahí llamamos a mami y papi para que nos venga a buscar =$.
Bueno, a lo que apunta esta entrada, con Nuco acordamos ¿Qué tal si vamos al Amago?. Probablemente se le haya ocurrido a él porque la verdad que no tenía idea qué mierda era el Amago (foto 2: no sé si se ve pero en las montañitas hay un palito a la izquierda de la V que se forma). Así fue como decidimos hacer la gran travesía de caminar cerro arriba hasta llegar a nuestra "meta" donde acamparíamos esa noche y volveríamos para la tarde del día siguiente. Por supuesto tan maravilloso plan implicaba también una maravillosa imponencia de mis viejos a no querer que vaya. Dándonos como resultado; Amague número 1.
Nos prometimos cumplirlo el próximo año.
El verano llegó nuevamente, luego de pasar por lluvias de hojas secas y pisadas de soretes otoñales, de que peque tuviese sus cachorros, del invierno frío como tanto odio, y de la estación donde el amor se percibe en el aire. Pfff, ilusos!. LLegó el verano sumer fest twenty eleven (como diría un detestable animador de boliche). (Gran paréntesis gran: me estoy yendo a la mierda con el relato, pasa que tengo sueño).
Llegó y era nuestro verano, llegó para quedarse, llegó para cumplir cierto deber con nosotros mismos. LLegó.. y estabamos más hechos mierda que nunca (por lo menos hablo por mí, tengo un agujero en el músculo del gemelo que no sé por qué mierda apareció y todavía no entiendo bien qué carajo es). Sofi diría "¿Te acordás cuando Mati y Maxi estaban trabados.. y Nuco no estaba gordo?" Bueno, algo así, era lo que pasaba.
Estábamos listos, mentalizados, mis viejos no sé por qué ahora me dejaban ir, incluso hasta estaban optimistas ante la idea de que se me ocurriera hacer dedo. Listos. La mochila con abrigo, malla, pilas y cámara de fotos, bolsa de dormir. Agarré la bicicleta y me fui a la concha del mono. Casi. A la casa de Nuco =P. Después de la subida agotadora (aclaro que yo tengo peor estado físico que un ladrillo) Llegué. Todo listo. Todo. Menos la carpa. Amague número 2.
Terminamos yendo al río ese día con Sofi e Irina, pondría el álbum de fotos pero como rubia fiel a mis raíces las borré por error D= .
"Ya está" dijimos. Siendo miércoles 2 de Febrero y con fecha de regreso para el domingo. "Ya está, la tercera es la vencida". Pese a que ultimamente los días estaban nublados y a veces llovía por las noches, nos jugamos igual. Al día siguiente agarré la bicicleta nuevamente y la corrí a un costado para subir al auto. Nah, mentira, me subí y empezó el sufrimiento. Cómo odíaba la última lomita antes de llegar a la casa, era terrible, mi velocidad llegó a ser 1.5 km/h pero con la decencia de no bajarme de la bicicleta por más que vaya más lento que caminando al paso de volver de la facultad. LLegué y vi a Nuco armando y arreglando la carpa que ya teníamos =D. Un raaato después, luego de ordenar todo y muchas langostas de por medio, zarpamos a nuestro destino!. Creo que cuando llegué al Azud no daba más, si bien el meterme al río me rejuveneció al menos.. 2 meses, cuando llegué al primer caracol rogaba a gritos que pase una chata para levantarnos. Nuco mantenía cierto instinto macho alfa tratando de seguir, hasta caer finalmente a los pies de la chata de los sueños (?). Chata número 1.
Al final fue una buena idea porque llegamos justo a tiempo para armar la carpa y buscar madera para cocinar el arroz antes de que anocheciera(sí, no tuve mejor idea que llevar arroz y pelear a muerte que era lo mejor que podríamos llevar para cocinar). Me di cuenta que soy inservible hasta para buscar ramitas para hacer fuego, así que me ocupé de tapar la ventilación de la carpa que ya había armado nuco, por si llovía, mientras él buscaba ramitas =$. Básicamente es eso. La noche fue tremenda, no hizo tanto frío y no hubo ni viento. Tremenda, pero dejando de lado el momento en el que empezamos a escuchar música proveniente de algún lugar misterioso porque estábamos alejados de todo, y sin embargo se escuchaba bien =S. La vuelta fue todavía más triste, qué conste que quería ir caminando pero me convencen fácil así que casi toda la vuelta la hicimos motorizada. Ahí es donde entra en juego la: Chata número 2.
Bueno, acá termina la historia de nuestros amagues al Amago (voy a agregar un álbum con las fotos), no sé porque mierda quedó tan larga la historia, así nadie la va a leer. Pero bueno, hay cosas que nunca se van a saber.. como mi misterioso agujero en el gemelo, si a alguien se le ocurre alguna idea de lo que puede ser, comente aquí y estaré infinitamente agradecida =)
lo anecdótico de esto fue que no me acordaba cómo ir, y nuco en un principio no sabía de qué río se trataba, así que tomamos un camino y nos cruzamos con un gaucho a caballo que nos dijo "niiiiño pero eso queda como a 22 kilóóómetros" (con tonito puntano). Probablemente no haya dicho eso textualmente pero fue algo parcido y más tarde era lo que nosotros andábamos diciendo con motivo de burla al tipo (porque sabíendo que ese lugar quedaba como a 10 km, pensamos que nos había dicho cualquier banana). Finalmente, nos dimos cuenta que el chabón no estaba demasiado equivocado porque prácticamente habremos caminado unos 18 kilómetros más, por haber elegido otro camino menos directo y otos 5 kilómetros de vuelta. Cuando llegamos al río... estaba seco. Y no sólo que estaba completamente seco, sino que se había desatado una tremenda tormentita de viento y arena que nos hacía mierda los ojos y las piernas. Ahí llamamos a mami y papi para que nos venga a buscar =$.
Bueno, a lo que apunta esta entrada, con Nuco acordamos ¿Qué tal si vamos al Amago?. Probablemente se le haya ocurrido a él porque la verdad que no tenía idea qué mierda era el Amago (foto 2: no sé si se ve pero en las montañitas hay un palito a la izquierda de la V que se forma). Así fue como decidimos hacer la gran travesía de caminar cerro arriba hasta llegar a nuestra "meta" donde acamparíamos esa noche y volveríamos para la tarde del día siguiente. Por supuesto tan maravilloso plan implicaba también una maravillosa imponencia de mis viejos a no querer que vaya. Dándonos como resultado; Amague número 1.Nos prometimos cumplirlo el próximo año.
El verano llegó nuevamente, luego de pasar por lluvias de hojas secas y pisadas de soretes otoñales, de que peque tuviese sus cachorros, del invierno frío como tanto odio, y de la estación donde el amor se percibe en el aire. Pfff, ilusos!. LLegó el verano sumer fest twenty eleven (como diría un detestable animador de boliche). (Gran paréntesis gran: me estoy yendo a la mierda con el relato, pasa que tengo sueño).
Llegó y era nuestro verano, llegó para quedarse, llegó para cumplir cierto deber con nosotros mismos. LLegó.. y estabamos más hechos mierda que nunca (por lo menos hablo por mí, tengo un agujero en el músculo del gemelo que no sé por qué mierda apareció y todavía no entiendo bien qué carajo es). Sofi diría "¿Te acordás cuando Mati y Maxi estaban trabados.. y Nuco no estaba gordo?" Bueno, algo así, era lo que pasaba.
Estábamos listos, mentalizados, mis viejos no sé por qué ahora me dejaban ir, incluso hasta estaban optimistas ante la idea de que se me ocurriera hacer dedo. Listos. La mochila con abrigo, malla, pilas y cámara de fotos, bolsa de dormir. Agarré la bicicleta y me fui a la concha del mono. Casi. A la casa de Nuco =P. Después de la subida agotadora (aclaro que yo tengo peor estado físico que un ladrillo) Llegué. Todo listo. Todo. Menos la carpa. Amague número 2.
Terminamos yendo al río ese día con Sofi e Irina, pondría el álbum de fotos pero como rubia fiel a mis raíces las borré por error D= .
"Ya está" dijimos. Siendo miércoles 2 de Febrero y con fecha de regreso para el domingo. "Ya está, la tercera es la vencida". Pese a que ultimamente los días estaban nublados y a veces llovía por las noches, nos jugamos igual. Al día siguiente agarré la bicicleta nuevamente y la corrí a un costado para subir al auto. Nah, mentira, me subí y empezó el sufrimiento. Cómo odíaba la última lomita antes de llegar a la casa, era terrible, mi velocidad llegó a ser 1.5 km/h pero con la decencia de no bajarme de la bicicleta por más que vaya más lento que caminando al paso de volver de la facultad. LLegué y vi a Nuco armando y arreglando la carpa que ya teníamos =D. Un raaato después, luego de ordenar todo y muchas langostas de por medio, zarpamos a nuestro destino!. Creo que cuando llegué al Azud no daba más, si bien el meterme al río me rejuveneció al menos.. 2 meses, cuando llegué al primer caracol rogaba a gritos que pase una chata para levantarnos. Nuco mantenía cierto instinto macho alfa tratando de seguir, hasta caer finalmente a los pies de la chata de los sueños (?). Chata número 1.
Al final fue una buena idea porque llegamos justo a tiempo para armar la carpa y buscar madera para cocinar el arroz antes de que anocheciera(sí, no tuve mejor idea que llevar arroz y pelear a muerte que era lo mejor que podríamos llevar para cocinar). Me di cuenta que soy inservible hasta para buscar ramitas para hacer fuego, así que me ocupé de tapar la ventilación de la carpa que ya había armado nuco, por si llovía, mientras él buscaba ramitas =$. Básicamente es eso. La noche fue tremenda, no hizo tanto frío y no hubo ni viento. Tremenda, pero dejando de lado el momento en el que empezamos a escuchar música proveniente de algún lugar misterioso porque estábamos alejados de todo, y sin embargo se escuchaba bien =S. La vuelta fue todavía más triste, qué conste que quería ir caminando pero me convencen fácil así que casi toda la vuelta la hicimos motorizada. Ahí es donde entra en juego la: Chata número 2.
Bueno, acá termina la historia de nuestros amagues al Amago (voy a agregar un álbum con las fotos), no sé porque mierda quedó tan larga la historia, así nadie la va a leer. Pero bueno, hay cosas que nunca se van a saber.. como mi misterioso agujero en el gemelo, si a alguien se le ocurre alguna idea de lo que puede ser, comente aquí y estaré infinitamente agradecida =)
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